En un dramático y emocionante encuentro, el Paris Saint-Germain (PSG) se alzó con la Supercopa de Europa al derrotar al Tottenham Hotspur en una definición por penales. El equipo de Luis Enrique protagonizó una remontada espectacular, logrando igualar un marcador adverso de 2-0 en los minutos finales del partido.
El Tottenham, con una actuación destacada de su defensa, parecía tener el control del encuentro. Los goles de Micky Van de Ven y, sorpresivamente, del defensor argentino Cuti Romero, le daban una cómoda ventaja de dos tantos. Sin embargo, el PSG no bajó los brazos y demostró por qué es uno de los equipos más poderosos del continente.
La reacción parisina llegó en el último cuarto de hora. Lee Kang-in y Gonçalo Ramos fueron los autores de los goles que devolvieron la esperanza al conjunto francés y forzaron la definición desde los doce pasos.
En la tanda de penales, el portero del PSG, Lucas Chevalier, se convirtió en el héroe de la noche. A pesar de una actuación irregular durante los 90 minutos, Chevalier se lució al atajar el disparo de Micky Van de Ven, dándole a su equipo la ventaja que sería crucial para el resultado final. A pesar de que Vitinha falló su penal para el PSG, los errores del Tottenham en la definición permitieron al equipo de París imponerse con un marcador de 4-3.
De esta manera, el PSG, a pesar de no haber tenido un desempeño brillante durante gran parte del partido, demostró su capacidad de reacción y la calidad de sus individualidades para remontar una situación adversa y celebrar un nuevo título europeo.