La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) inició una huelga nacional indefinida el 15 de mayo, tras no obtener respuesta a los paros nacionales previos de 48 y 72 horas. La jornada de lucha comenzó formalmente con una megamarcha y la instalación de un plantón en el Zócalo de la Ciudad de México, donde se mantiene una presencia estimada en 8,000 personas. La CNTE considera que este inicio de huelga es un éxito y la movilización más grande en los últimos 12 años.
Como parte del reforzamiento de su jornada de protestas, la CNTE ha intensificado sus acciones en los días recientes. El lunes 26 de mayo, desplegó bloqueos simultáneos en múltiples puntos de la capital, afectando oficinas gubernamentales y sedes de medios de comunicación. Entre las dependencias bloqueadas ese día se encuentran la Secretaría de Educación Pública (SEP), el Instituto Nacional Electoral (INE) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). También se bloquearon instalaciones de medios como TV Azteca, Multimedios Televisión, Televisa Chapultepec, XEW Radio y Grupo ACIR, impidiendo incluso el acceso de personal y conductores de programas de televisión.
Así la CNTE hizo temblar el AICM, así fue la movilización y todo el movimiento #CNTE #AICM pic.twitter.com/hfneyMChHN
— ¡Qué Chingados! (@QueChingadosNew) May 24, 2025
Estos bloqueos se suman a otras acciones destacadas, como los bloqueos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) los días 23 y 24 de mayo. El del 23 de mayo involucró a cerca de 10 mil integrantes, afectó a más de 3,200 pasajeros y provocó el desvío de 15 vuelos. Previamente, el 21 de mayo, marcharon por embajadas en Polanco para solicitar que presionen al gobierno mexicano a resolver sus demandas, y también bloquearon Avenida Reforma. La CNTE ha anunciado nuevas movilizaciones para el martes 27 de mayo, con la intención de dirigirse a sedes de instituciones financieras (Afores) y plazas comerciales para realizar más bloqueos.
Las demandas centrales por las que la CNTE mantiene la huelga y las movilizaciones incluyen:
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La abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007, a la que consideran una “herencia del calderonismo” que les arrebató el derecho a las pensiones. Acusan al gobierno de proteger los intereses de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), que han obtenido ganancias millonarias, calificándolo como un “saqueo legalizado”. Exigen la recuperación de un “sistema solidario, colectivo e intergeneracional de pensiones”, e insisten en que “vinimos por la abrogación de la Ley del ISSSTE; no aceptaremos nada menos”. Señalan que el 80% de los maestros ya no tiene acceso a una pensión digna bajo el sistema actual. Consideran que revertir esta ley y desmantelar el sistema de Afores es justo y urgente.
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La abrogación de la reforma educativa impuesta por Enrique Peña Nieto, lo que implicaría eliminar el régimen de excepción laboral que se encuentran.
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Un aumento salarial del 100% directo al sueldo base. Rechazan el incremento del 9% (más un 1% adicional) anunciado por la presidenta, al que califican como una “respuesta nula” que no compensa la pérdida de poder adquisitivo. Consideran que el 100% es un punto de partida para el diálogo. Afirman que los maestros de la Ciudad de México perciben los salarios más bajos del país.
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La reinstalación inmediata y sin condicionamientos de los trabajadores cesados.
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Demandas específicas sobre el sistema de pensiones, como la eliminación de la UMA, las cuentas individuales, el cálculo de pensiones con base en el salario mínimo, y el reconocimiento de la jubilación por años de servicio (28 para mujeres y 30 para hombres).
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El incremento del presupuesto público en salud y educación.
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Justicia social y democracia sindical, incluyendo la eliminación del Reglamento para la elección de directivas sindicales del SNTE.
En cuanto al diálogo, la CNTE sostiene que sus demandas “no son nuevas” y han sido “ignoradas por años”. Han calificado las mesas con el gobierno como una “simulación” y una política de “cerrazón y desprecio”. La primera reunión con los titulares de la SEP, la Segob y el ISSSTE fue descrita como un “insulto a la inteligencia del magisterio” debido a las “respuestas nulas”. Además, acusan a la presidenta Claudia Sheinbaum de cancelar una mesa de diálogo prevista para el 23 de mayo de forma informal, mediante un mensaje de WhatsApp. Insisten en que exigen “respuestas concretas y no sólo diálogo y más diálogo”, y reclaman la reinstalación inmediata de la mesa central con la presidenta, al considerar que no tiene sentido acudir a reuniones con secretarios que solo repiten los mismos argumentos.
Por su parte, el gobierno federal, a través de la Segob y la SEP, ha reiterado su disposición al diálogo y ha instado a los maestros a reanudar las clases para garantizar el cierre ordenado del ciclo escolar, señalando que la huelga afecta a cerca del 7% de los planteles del país. La presidenta Sheinbaum ha reconocido que la reforma al ISSSTE de 2007 fue inadecuada, pero advierte que regresar al régimen anterior pondría en riesgo las finanzas públicas, los programas sociales y los salarios del sector público, pues “no hay presupuesto” para atender las demandas en los términos planteados. Asegura que las cuentas individuales son propiedad de los trabajadores y no pueden utilizarse para financiar un retorno a un sistema solidario. También ha defendido propuestas del gobierno como la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar y el congelamiento de la edad mínima de jubilación, afirmando que estas garantizan pensiones equivalentes al último salario (hasta cierto tope) y que son superiores al régimen de 2007 e incluso al anterior.
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La CNTE rechaza los señalamientos que intentan vincular su lucha con posiciones de derecha y niega haber llamado a boicotear las elecciones. Considera que las acciones del gobierno forman parte de un “plan de Estado para desactivarla”, que incluye minimizar la huelga, dividir y aislar al movimiento, y lanzar una campaña mediática. Acusa al gobierno de intentar cooptar y presionar a sus dirigentes. Frente a lo que perciben como falta de voluntad política, la CNTE reafirma su táctica de “Movilización-Negociación-Movilización” como legítima y necesaria para enfrentar la simulación y las promesas incumplidas. Consideran que la lucha por la abrogación de la Ley del ISSSTE es una lucha por todos los trabajadores del país, y hacen un llamado a generalizar el paro.
